
Último día de estas vacaciones cátaras. Tanto va el cátaro a la fuente… (es que si no lo digo, reviento). Pues bien, ayer os comentaba que nos tocaba el sur-oeste. No hay caso. Hoy cogió Alex el mapa y se inspiró, “¡mejor vamos al norte!”. Y al norte que fuimos.
Primera parada, buscar “los mejores croissants de la ciudad”, gracias a las instrucciones de nuestro anfitrión. Nos dio las instrucciones mal. Así que hemos terminado desayunando unos bollos riquísimos en otro sitio.